RUPERTO DE DEUTZ

1.- El espíritu del Señor está sobre mí. (10 ene 2014).

Hoy se cumple esta escritura que acabáis de oír. "El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido". Es como si Cristo dijera: "Porque el Señor me ha ungido, he dicho: El Espíritu del Señor está sobre mí". El Señor me ungió cundo fui concebido o, mejor dicho, me ungió a fin de que fuera concebido en el seno de mi madre. El Señor me selló con la unción real; me consagró rey por la unción y, en el mismo momento, e consagró sacerdote. Por segunda vez, en el Jordán, el Señor me consagró por este mismo Espíritu. "Y ¿por qué el Espíritu del Señor está sobre mí? Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres. No me ha enviado para los orgullosos y los sanos, sino como médico para los enfermos y los corazones destrozados. Me ha enviado a proclamar la amnistía a los cautivos, y a los prisioneros, la libertad. ¿A qué prisioneros, o mejor, a que prisión he de anunciar la libertad? Por un hombre entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte, todos los hombres son prisioneros del pecado, todos los hombres son cautivos de la muerte. He sido enviado a consolar a todos los afligidos de Sión, sí, yo los consolaré dándoles una diadema de gloria enlugar de las cenizas de la penitencia, aceite de júbilo, es decir, la consolación del Espíritu Santo, en lugar del dolor de verse huérfanos y exiliados, y un vestido de fiesta, es decir, la gloria de la resurrección, en lugar de la desesperación".

2.- Aquí hay uno que es más que Salomón. (21 jul 2014).

El profeta Natán presentó su `proyecto ante el anciano rey David, que iba a morir. Dando su aprobación, el rey declaró: Establezco a Salomón como rey en Israel y el sur de Judea. Por la iniciativa de un profeta, Salomón fue nombrado rey; así se cumplieron las profecías en su sentido espiritual: que Cristo, Hijo de Dios, sería reconocido Rey pacífico, Rey de la gloria del Padre, atrayéndolo todo hacia él. Salomón llegó a ser rey en vida de su padre, como Cristo fue establecido Rey por Dios, el Padre que no puede morir. Sí, ciertamente, lo hizo Rey, heredero de todas las cosas, el que no muere ni morirá jamás. Y lo que es admirable y único, Cristo, heredero de un Padre siempre vivo y que nunca morirá, murió una vez por todas; entró en la vida y no morirá nunca más.

Entonces, Salomón se sentó en la mula del Rey, sobre el trono de su Padre, es decir, sobre toda la Iglesia, por encima de principados, potestades, tronos y dominaciones, y Cristo está sentado ahora a la derecha de la Majestad en los cielos. Por ello toda la multitud sube a su casa, un pueblo que canta y acoge a su Rey con beneplácito. Y la tierra se estremece con su clamor. Nosotros también hemos entendido la gran alegría de quienes proclamaban la gloria, el júbilo de los apóstoles cundo hablaban en todos los idiomas de modo que por toda la tierra ha resonado su voz y sus palabras han llegado hasta los confines del mundo.

3.- El recaudador de impuestos liberado para el reino de Dios.(18 sep 2015).

El publicano Mateo recibió como alimento el pan de vida e inteligencia; y de esta misma inteligencia hizo en su casa un gran banquete para el Señor Jesús porque había sido hecho partícipe de una abundante gracia, conforme a su nombre, que quiere decir "don del Señor". Llamado cuando estaba sentado en su puesto de recaudador, siguió al Señor y le ofreció en su casa un gran banquete. Le ofreció, pues, un banquete, y un gran banquete, que nosotros llamaríamos un banquete real.

En efecto, Mateo es el evangelista que nos muestra que Cristo es Rey por su estirpe y por sus obras. Comienza su evangelio con la genealogía de Jesucristo Hijo de Dios. Seguidamente, narra cómo el recién nacido es adorado por los Magos con el título de rey de los judíos; después, entretejiendo todo el resto de su narración con gestos reales y parábolas del reino, al final acaba con estas palabras dichas por este Rey ya coronado con la gloria de la resurrección: Me ha sido dada toda potestad en el cielo y en la tierra. Si examinas con atención todo el conjunto de su redacción, reconocerás que en toda ella se respiran los misterios del reino de Dios. Nada de extraño hay todo ello; Mateo había sido publicano, se acordaba de haber sido llamado del servicio público del reino del pecado a la libertad del reino de Dios, del reino de la justicia. Un hombre que no quiso ser ingrato con el gran rey que le había liberado sirvió fielmente a las leyes de su reino.

4.- Vio a Jesús que pasaba. (04 ene 2016)

Juan estaba allí, de pie, con dos de sus discípulos cuando Jesús pasaba. Se trata de una postura corporal que expresa algo de la misión de Juan, de su vehemencia de palabra y de acción. Pero, según el evangelista, se trata también, más profundamente, de esta viva tensión, siempre presente entre los profetas. Juan no se contentaba con desempeñar exteriormente su papel de precursor. Él guardaba en su corazón el vivo deseo de ver a su Señor, a quien había reconocido en el bautismo. Sin duda alguna, Juan tendía hacia el Señor con todo su ser. Juan se tenía en pie, alerta por el deseo profundo de su corazón. Se mantenía de pie, esperaba a Cristo todavía oculto en la sombra de su humildad.

Viendo a Jesús que pasaba, Juan dice: ¡Éste es el Cordero de Dios! Prestad atención a las palabras de esta narración. A primera vista, todo parece claro, pero para quien penetra en el sentido profundo, todo se manifiesta cargado de significado y misterio. Jesús pasaba. ¿Qué significa sino que Jesús vino a participar en nuestra naturaleza humana que pasa, que cambia? Vino en el seno de la Virgen. Luego, pasó del seno de su madre al pesebre y del pesebre a la cruz, de la cruz al sepulcro, del sepulcro se elevó al cielo. Si nuestro corazón aprende a desear a Cristo como Juan, reconocerá a Jesús cuando pase. Si le sigue, llegará como los discípulos al sitio donde mora Jesús: en el misterio de su divinidad.

5.- El Espíritu del Señor está sobre mí. (10 ene 2019)

Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír: "El Espíritu del Señor está sobre mí, porque él me ha ungido". Es como si Cristo dijera: El Espíritu del Señor está sobre mí. ¿Dónde, en qué momento, el Señor me ha ungido? Me ungió cuando fui concebido, o mejor dicho, me ungió a fin de que fuera concebido en el seno de mi madre. Porque no es de la simiente de un hombre que me concibió una mujer, sino que una virgen me concibió por la unción del Espíritu Santo. Fue entonces cuando el Señor me selló con la unción real; me consagró rey por la unción y, en el mismo momento, me consagró sacerdote. Una segunda vez, en el Jordán, el Señor me consagró por este mismo Espíritu.

Y ¿por qué el Espíritu del Señor está sobre mí? Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres, curar los corazones desgarrados. No me ha enviado para los orgullosos y los sanos, sino como un médico para los enfermos y los corazones destrozados. No me ha enviado para los justos, sino para los pecadores. Ha hecho de mí un varón de dolores, acostumbrado a sufrimientos, un hombre manso y humilde de corazón. Me ha enviado a proclamar la amnistía a los cautivos y a os prisioneros, la libertad. ¿A qué prisioneros, o mejor, a qué prisión he de anunciar la libertad? Todos los hombres son prisioneros del pecado, todos los hombres son cautivos de la muerte.

6.- El esposo está con ellos. (21 ene 2019).

Desborde de gozo con el Señor y me alegro con mi Dios. El advenimiento, la presencia del Señor de la que habla el profeta en este versículo, es el beso que desea la esposa del Cantar cuando dice: Que me bese con el beso de su boca. Y esta esposa fiel es la Iglesia: ella nació en los patriarcas, se desposó en Moisés y en los profetas; con ardiente deseo en Moisés y en los profetas; con ardiente deseo de su corazón suspiraba por la venida del Amado; llena del gozo ahora por el beso que ha recibido, exclama gozosa: ¡Desbordo de gozo con el Señor!

Este versículo se refiere totalmente a la Iglesia exultante, cuando, en los infiernos, se apresura a ir al encuentro del Esposo y dice: Desbordo de gozo con el Señor y me alegro con mi Dios. ¿Cuál es la causa de mi gozo? ¿Cuál es el motivo de mi exultación? Es porque me ha revestido con traje de gala y me ha envuelto en un manto de triunfo. En Adán fui desnudada, tuve que juntar hojas de higuera para esconder mi desnudez; miserablemente cubierta con túnicas de piel, fui expulsada del paraíso. Pero hoy, mi Señor y mi Dios ha sustituido las hojas por el traje de gala. A causa su pasión en nuestra carne, me ha puesto un primer vestido, el del bautismo y la remisión de los pecados; y en lugar de la túnica de piel de la mortalidad, me ha envuelto en un segundo vestido, el de la resurrección y la inmortalidad.

7.- Todas las naciones del mundo se llamarán benditas por causa tuya. (17 dic 2019).

Se nos lee la genealogía de Cristo en san Mateo. Esta costumbre de la santa Iglesia tiene un bello y misterioso motivo. Esta lectura nos presenta la escalera que Jacob vio de noche durante un sueño. En lo alto de esta escalera, que por la parte alta tocaba al cielo, el Señor apoyado en ella, se apareció a Jacob y le prometió darle en herencia la tierra. Hora bien, sabemos que estas cosas sucedieron en figura para nosotros. ¿qué prefiguraba esta escalera sino la casta de la que Jesucristo debía nacer, casta qué, por boca del santo evangelista, va avanzando de tal manera que acaba en Cristo pasando por José? Es en este José en quién Jesús, siendo niño, se apoyó. A través de la puerta del cielo, es decir, por la bienaventurada Virgen María, hecho niño por nosotros, salió gimiendo. Durante el sueño, Jacob oyó que el Señor le decía: Todas las naciones del mundo se llamarán benditas por causa tuya y ahora, por el nacimiento de Cristo, se cumple esta realidad.

Es esto mismo lo que el evangelista veía cuando puso en su genealogía a Rahab la prostituta y a Rut la moabita; porque veía muy claro que Cristo no vino en la carne solamente para los judíos, sino también para los paganos. Provenientes, pues, de los dos pueblos, judíos y paganos, como los dos lados de la escalera, los antiguos padres, situados en diferentes peldaños, sostienen a Cristo Señor que sale de lo alto de los cielos.

8.- Una luz se levanta sobre los que habitan en el país de las tinieblas. (07 ene 2020).

Jesús se retiró a Galilea y, dejando Nazaret, fue a residir en Cafarnaún junto al mar, en el templo de Zabulón y Neftalí. Así se cumplió lo que el Señor había dicho por boca de Isaías: El pueblo que habitaba en las tinieblas vio levantarse una gran luz. Seguramente que, al hablar de levantarse una gran luz. Mateo quiere hacernos comprender la luminosa predicación del Salvador, el esplendor de la Buena Noticia del reino de Dios; antes que otras fueron la tierra de Zabulón y Neftalí las que la oyeron de la misma boca del Señor.

Es en esta tierra donde el Señor empezó a predicar, es en ella donde inauguró su predicación. Y los apóstoles, que fueron los primeros en ver esta luz verdadera en los territorios de Zabulón y de Neftalí, llegaron a ser ellos mismos "luz del mundo". Acrecentaste la alegría, continua el texto de Isaías, aumentaste el gozo; se gozan en tu presencia, como gozan al segar; como se alegran al repartirse el botín. Esta alegría será, efectivamente, la alegría de los apóstoles, una alegría multiplicada, cuando vengan como segadores trayendo sus gavillas.

En efecto, eres tú Señor y Salvador, quien, sin ejército, sin efusión de sangre, en lo secreto de tu poder, has liberado a los hombres para poderlos a tu servicio.

9.- El Espíritu del Señor está sobre mí. (10 ene 2020).

Hoy se cumple esta Escritura que acabáis de oír: "El Espíritu del señor está sobre mí, porque él me ha ungido" Es como si Cristo dijera: "Porque el Señor me ha ungido, he dicho: el Espíritu del Señor está sobre mí. El Señor me ungió cuando fui concebido o, mejor dicho, me ungió a fin de que fuera concebido en el seno de mi madre. El Señor me selló con la unción real; me consagró rey por la unción y, en el mismo momento, me consagró sacerdote. Por segunda vez, en el Jordán, el Señor me consagró por este mismo Espíritu.

"Y ¿por qué el Espíritu del Señor está sobre mí? Me ha enviado para dar la Buena Noticia a los pobres. No me ha enviado para los orgullosos y los sanos, sino como un médico para los enfermos y los corazones destrozados. Me ha enviado a proclamar la amnistía a los cautivos y a los prisioneros, la libertad ¿A qué prisioneros, o mejor, a qué prisión he de anunciar la libertad? Por un hombre entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte, todos los hombres son prisioneros del pecado, todos los hombres son cautivos de la muerte. He sido enviado a consolar a todos los afligíos de Sion, sí, yo los consolaré dándoles una diadema de gloria en lugar de las cenizas de la penitencia, aceite de júbilo, es decir, la consolación del Espíritu Santo, en lugar del dolor de verse huérfanos y exiliados, y un vestido de fiesta, es decir, la gloria de la resurrección, en lugar de la desesperación".

10.- El novio está con ellos. (20 ene 2020).

Desbordo de gozo con el Señor y me alegro con mi Dios; como el esposo se pone la corona; como la esposa se adorna con las joyas. Cabeza y miembros. Esposo y Esposa, Cristo y la Iglesia, somos un solo cuerpo. Desde ahora, en Cristo, el Esposo, brillará para siempre la corona del triunfo -él, mi cabeza, que sufrió por algún tiempo-; mientras que sobre mí, su Esposa, brillarán las joyas de sus victorias y de sus gracias.

Como el suelo echa brotes, como un jardín hace brotar sus semillas, así el Señor hará brotar la justicia y los himnos ante todos los pueblos. Él es el Esposo, y yo la Esposa; él es el Señor Dios, y yo su tierra y su jardín; él es el jardinero, y yo su campo. Así como él, por ser mi Creador, es mi Señor y mi Dios, es también mi jardinero porque se ha hecho hombre. Así como el jardinero planta y riega y Dios da el crecimiento, de la misma manera él, que es el Único por su humanidad va a plantar y regar anunciando la Buena Nueva, y por su divinidad dará el crecimiento gracias a su Espíritu. Entonces yo, la Iglesia haré brotar la justicia de la fe y la alabanza de Dios, no tan solo ante el pueblo judío, sino ante todas las naciones. Ellas verán mis buenas obras, leyendo las palabras y las acciones de los patriarcas y de los profetas, escuchando la voz de los apóstoles y acogiendo su luz; ellas verán y creerán, y así darán gloria al Padre que está en los cielos.

11.- Aquí hay uno que es más que Salomón. (20 jul 2020).

El profeta Natán, con Betsadé, presentó su proyecto ante el anciano rey David que iba a morir. Es entonces cuando Salomón, cuyo nombre significa "señor pacífico", recibió la unción real. Después, todo el pueblo recuperó su situación cotidiana; la multitud estaba contenta y la alegría era tan grande que los clamores hacían vibrar la tierra, porque el rey había declarado; Establezco a Salomón como rey de Israel y el sur de Judea. Esta entronización prefigura, sin duda alguna, el misterio del que habla Daniel: Comenzó la sesión y se abrieron los libros... vi venir una especie de hijo de hombre entre las nubes del cielo. Avanzó hacia el anciano y llegó hasta su presencia. A ´él se le dio poder, honor y reino.

Por lo tanto, por la iniciativa de un profeta, Salomón fue nombrado rey, así se cumplieron las profecías en su sentido espiritual: Cristo, Hijo de Dios, sería reconocido Rey pacífico, Rey de la gloria del Padre, atrayéndolo todo hacia él. Salomón llegó a ser rey en vida de su padre, como Cristo fue establecido Rey por Dios, el Padre que no pudo morir. Sí, ciertamente, lo hizo Rey, "heredero de todas las cosas" (Heb 1, 2), el que no muere ni morirá jamás. Y lo que es admirable y único, Cristo, heredero de un Padre siempre vivo y que nunca morirá, murió, una vez por todas; entró en la vida y no morirá nunca más